Felipe contaba hasta veinte para que su hermano pudiera esconderse en algun lugar de la planta alta de la casa de dos pisos. Su hermano salió de la pieza, miró hacia el final del pasillo y en ese momento su mente se iluminó -Y si me escondo en el armario de mis papás- pensó. Corriendo, pues le quedaban solo 10 segundos para que su hermano terminara de contar, llegó al final del pasillo y entró a la pieza de sus padres. Luego Felipe avisa que ha terminado de contar y que saldrá a buscar. Cuando entra a la pieza de sus padres buscando a su hermano se lo topa en la puerta del armario muy sorprendido. Al pasar unos minutos se da cuenta que en un rincón oscuro del closet hay tres regalos ocultos.
Cuando su padre llega del trabajo se encuentra a sus hijos sentados en el sofá que hay en la entrada y los tres regalos intactos sobre la mesa de centro frente al sofá.
El padre le pregunta a sus hijos qué ha pasado y ellos le dicen que Santa se ha equivocado y les ha entregado los regalos antes de navidad.
El padre aprovechando el punto de vista de los niños les dice que lo solucionará, y acto seguido saca su celular y marca siete números al azar. Luego se lo pone en su oreja, espera unos segundos y hace como que habla con alguien. Para la sorpresa del padre, le contesta una voz ronca y paciente, que le pregunta: ¿Cuál es el problema?. El padre sorprendido le cuenta lo sucedido a aquella voz extraña, y la voz a cambio le dice que no hay ningún problema, que en 5 minutos alguien pasará por su casa para arreglar el mal entendido. Finalmente cuelga y a los dos minutos, cuando aún estaban los tres en la sala, alguien toca el timbre. El padre abre la puerta y se encuentra una persona con barba, vestida de rojo, de edad y pelo blanco. Es Santa!!!- exclaman los niños. Santa les pregunta dónde están lo regalos, los niños se los pasan y Santa les pide disculpas por el mal entendido... Despues de entregarle los regalos a Santa, los niños suben a sus piezas sin poder creer lo que les acaba de suceder, dejando al padre solo con él.
El padre le da las gracias a Santa, a lo que Santa contesta: "No, gracias a usted por creer. Buen día y feliz noche buena".
